Con el objetivo de subsanar diversos deterioros estructurales que podrían arriesgar la seguridad de las operaciones aeronáuticas en la principal pista de aterrizaje de la Antártica, a partir de la próxima primavera la Dirección de Aeropuertos del Ministerio de Obras Públicas efectuará trabajos de conservación mayor en el área de movimiento en el aeródromo Teniente Marsh.
La realización de estas faenas fue confirmada hoy tras la toma de razón por parte de la Contraloría General de la República del contrato de adjudicación por la suma de $19.038.484.251 a un consorcio conformado por las empresas Bravo Izquierdo, Conpax y Huenchuñir, el cual tendrá un plazo de 720 días corridos para su materialización.
La ministra de Obras Públicas, Jessica López, expresó que “esta obra en el aeródromo Teniente Marsh resulta muy necesaria, porque la pista presenta desprendimientos y baches que significan un riesgo. A esto se suma que a fin de año también empezaremos a construir un muelle en Bahía Fildes, cumpliendo así con la materialización de obras que llevaban mucho tiempo postergadas y que son relevantes para fortalecer la posición estratégica de Chile en la Antártica”.
Las obras en el aeródromo consistirán en el movimiento del terreno de la pista de grava, de 1.292 metros de longitud y 39 metros de ancho, con el objetivo de formar una nueva base estabilizada de 70 centímetros de espesor. Tareas similares se efectuarán en la calle de rodaje y en la plataforma de estacionamiento de aeronaves, a lo que se sumará la nivelación de la franja de seguridad, la construcción de un terraplén y la conservación de las ayudas visuales. En total, la superficie a intervenir superará los 68 mil metros cuadrados.
Según recientes informes técnicos de la Dirección de Aeropuertos, este aeródromo presentaba deterioros propios de una carpeta que ha sido expuesta al tránsito de aeronaves en condiciones de frecuente congelación y deshielo. Entre otros, se había constatado la presencia de gran cantidad de material suelto en toda su superficie, desgaste superficial severo y gran cantidad de material fino compactado en una capa inferior. Asimismo, se apreciaban baches de diversa profundidad generadas por las maniobras y aterrizaje de los Hércules C130, los cuales favorecían la formación de pozas. Por último, se constataban daños en el sistema de ayudas visuales, tanto en los cables como en las canalizaciones de los circuitos eléctricos.
Respecto a la logística de esta obra, la directora nacional de Aeropuertos, Claudia Silva, explicó que “nos hemos coordinado con las empresas y con la Armada de Chile, a la cual agradecemos, para comenzar a trasladar maquinarias, materiales y personas desde octubre próximo y aprovechar al máximo la ventana de mejor clima y luminosidad en la Antártica. Además, procuraremos que estas obras tengan un mínimo impacto en los vuelos que realizan las fuerzas armadas y aviones privados durante el verano”.
Ubicado en la Isla Rey Jorge del archipiélago Shetland del Sur, a 1.250 km al sur de Punta Arenas, el aeródromo Teniente Marsh es el recinto aeroportuario de uso público más relevante que existe en el continente antártico y es considerado como el principal acceso aéreo para científicos, turistas y personal de bases de otros países ubicadas en el lugar. En 2024, en este aeródromo se contabilizaron 798 operaciones y se movilizaron 17.597 pasajeros.